La Unión Europea (UE) pidió este miércoles “asistencia internacional” para Afganistán tras el terremoto que ha dejado más de mil muertos en el país, en manos de los talibanes desde agosto pasado, y aseguró que prestará ayuda a quien lo necesite.
Más de mil personas murieron y otras mil 500 resultaron heridas en el terremoto de 5.9 grados Richter que sacudió anoche el este de Afganistán, donde, en el distrito más afectado, el 70% de las viviendas quedaron destruidas o dañadas, mientras los equipos de rescate tratan de localizar a supervivientes bajo los escombros.
El seísmo sorprendió a la gente mientras dormía, con escaso tiempo para huir al exterior de sus endebles viviendas de adobe en las remotas provincias orientales de Khost, donde se registró el epicentro, o Paktika, la más afectada por la tragedia.
El número de fallecidos asciende a mil 30, pero las autoridades advierten de que las cifras podrían aumentar a medida que avanzan las labores de rescate, mientras como manda la tradición islámica los entierros masivos comenzaron, sin tiempo a velar al cadáver.
El Departamento de Información y Cultura de Paktika aseguró a la agencia de noticias estatal afgana Bakhtar que solo en los distritos de Gayan y Barmal de esa provincia, más de mil personas murieron y más de mil 500 resultaron heridas, sin aportar más detalles.