«Teníamos 220, pero muchos eran duplicados (…) Tenemos una lista de unas 50 personas que no hemos ubicado, aunque muchas podrían no estar relacionadas con el incidente», señaló.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, expresó su solidaridad con los habitantes de Oakland, «una de las ciudades más creativas» del país, y prometió toda la ayuda federal necesaria en la investigación para determinar el origen del incendio.
Hasta ahora se ha retirado el 75% de los escombros del edificio, conocido como «Oakland Ghost Ship» (Barco Fantasma de Oakland), adonde se se estima que acudieron entre 50 y 100 personas durante la fiesta