Pese a los esfuerzos de las instituciones financieras privadas para otorgar créditos en 2016, la demanda no aumenta. Según datos de la Asociación de Bancos Privados, en el segundo trimestre del 2015, un 27% del sector industrial consideraba un buen momento para endeudarse; mientras que en el segundo trimestre de este año, un 19% de este sector creyó necesario adquirir un crédito.
La demanda de créditos también se redujo en el sector comercial. En el segundo trimestre de 2015, al menos, un 24% de este sector quería obtener un crédito, pero en el segundo trimestre de este año esa cifra bajó a un 14%.
Así lo explica Julio José Prado, presidente ejecutivo de la Asociación de Bancos Privados.
Las cifras revelan que en el primer semestre de 2015 los créditos entregados sumaron 9.431 millones de dólares, mientras que en el primer semestre de este año se otorgaron préstamos por 8.443 millones de dólares; es decir, casi 1.000 millones de dólares menos.
Pese a esta reducción Prado asegura que la demanda de créditos de consumo ha mejorado.
Víctor Hugo Albán, vicepresidente del Colegio de Economistas de Pichincha cree que entre las razones para la baja demanda de préstamos está la recesión económica y el proceso electoral del próximo año, que generan incertidumbre en la población.
Uno de los objetivos de la banca privada en este segundo semestre es entregar 10.000 millones de dólares en créditos para ayudar a la reactivación económica del país.
Prado afirma que la banca privada se mantiene saludable. Señala que en 8 meses consecutivos los depósitos han aumentado, pese a la delicada situación económica del país.
